Llegué por el dolor a la alegría.
Supe por el dolor que el alma existe.
Por el dolor, allá en mi reino triste,
Un misterioso sol amanecía.

José Hierro

jueves, 4 de abril de 2013

Desde la parra


 Llevo una temporada disperso, más hacia dentro que hacia fuera, más en la parra que aquí, ensimismado conmigo mismo en mi ensimismamiento.  Mi novia dice que a ver si va a ser la crisis de los 40…quién sabe. De todas formas siempre he sido de temperamento melancólico, las musarañas  y yo somos casi de la familia. El caso es que en un mes cumplo 40 tacos. Cuarenta tacos es media vida según las estadísticas del lne, que dicen que la esperanza de vida en hombres es de 80. Los 40 son como los 100.000 del coche, empiezan la averías y las iteuves  periódicas, hay que estar más pendiente de los niveles y todo lo demás.  Es normal que uno haga balance, que se interpele,  que haga un repaso de su bagaje, un inventario de lo que lleva metido en la mochila…¿no?...Joder... Inma va a tener razón, esto va a ser un crisis de los 40 de manual.

Últimamente hablo conmigo mismo más de lo habitual,  me hago las mismas  preguntas que los replicantes (más humanos que los humanos) de Blade Runner,  “¿de dónde vengo?”, “¿a dónde voy?” , “¿cuánto tiempo me queda?”, y  no dejo de darle vueltas a estos versos de Machado :
 
"Al borde del sendero un día nos sentamos. Ya nuestra vida es tiempo, y nuestra sola cuita son las desesperantes posturas que tomamos para aguardar...Mas ella no faltará a la cita" (XXXV. Poesías completas) 
 
El paso del tiempo y la muerte, casi nada...ya lo decía Jorge Manrique...
 
"Nuestras vidas son los ríos
que van a dar a la mar,
que es el morir;
allí van los señoríos
derechos a se acabar
 y consumir;
allí los ríos caudales,
allí los otros medianos
y más chicos,
allegados, son iguales
los que viven por sus manos
y los ricos."

Coplas a la muerte de su padre. Jorge Manrique.
 

Hay mucho de Manrique en la poesía de Machado.
 
Hace unos meses buscando unos libros en casa de mi madre apareció una foto que llevaba sin ver desde que me la  hice con 18 años. Era la foto que me hicieron para el carné militar cuando entré en la mili, de recluta. Con el pelo corto, diez kilos menos, gafas redondas  y granos en la cara, intentando mantener la compostura y llenar el uniforme, entre acojonado y  expectante, así salgo. No recordaba la foto y me impactó, bueno lo que más me impacto no fue la foto sino que hubieran pasado 21 años desde que me la hicieron y que casi no me hubiera enterado. La foto estaba en un libro titulado Caballo de Troya de JJ Benítez (tela) y tenía una dedicatoria escrita por mí que ponía “más vale tarde que nunca” con fecha de 1992. Enseguida recordé que me prestaron ese libro y quien me lo prestó, y cómo lo leí durante las imaginarias. Resulta que perdí el libro (si de repente apareciera todo lo que he perdido en estos 40 años tendría que alquilar dos trasteros), la persona que me lo prestó me preguntó por él y le dije que no lo había terminado, insistía y yo daba largas pensando que el libro aparecería. Durante un permiso de fin de semana fui a una librería, compré el libro y escribí la dedicatoria. Cuando esta persona vio que era nuevo y leyó la dedicatoria  me alabó el gesto y me dijo "quédatelo, así tienes un recuerdo mío". Al acordarme de la foto me he acordado del libro, y al acordarme del libro me he acordado de quien me lo prestó y acabó regalándomelo,  y me he quedado pensando en  cómo era yo cuando compré ese libro y escribí  aquella dedicatoria hace más de veinte años y en cómo soy ahora. No recuerdo ahora  quién dijo que los objetos son anzuelos para pescar recuerdos, despertadores de la memoria, lo bordó.

Hablando de las fotografías, el tiempo y la muerte...
 
"Pero al fin podré vencerte,
ave y rayo secular,
corazón, que de la muerte
nadie ha de hacerme dudar.
 
Sigue ,pues, sigue, cuchillo,
Volando, hiriendo. Algún día
se pondrá el tiempo amarillo
sobre mi fotografía"
 
El rayo que no cesa. Miguel Hernández.
 
 
Algún día se pondrá el tiempo amarillo sobre mi fotografía...qué bueno...siempre que veo fotos antiguas de gente que ya no está me acuerdo de este verso. Recuerdo lo que me impresionó  El rayo que no cesa la primera vez que lo leí...
 
Otro de Miguel Hernández que me gusta mucho, es un poco largo así que sólo pongo el principio...
 
"Hoy estoy sin saber yo no sé cómo,
hoy estoy para penas solamente,
hoy no tengo amistad,
hoy sólo tengo ansias
de arrancarme de cuajo el corazón
y ponerlo debajo de un zapato."
 
Me sobra el corazón. Miguel Hernández.
 
Miguel Hernández también tiene unos sonetos de amor geniales..., éste va por mi novia...

                       
      II

Mis ojos, sin tus ojos, no son ojos,
que son dos hormigueros solitarios,
y son mis manos sin las tuyas
varios
intratables espinos a manojos.
 
 No me encuentro los labios sin tus rojos,
que me llenan de dulces campanarios,
sin ti mis pensamientos son calvarios
criando nardos y agostando hinojos.

No sé qué es de mi oreja sin tu acento,
ni hacia qué polo yerro sin tu estrella,
y mi voz sin tu trato se afemina.

Los olores persigo de tu viento
y la olvidada imagen de tu huella,
que en ti principia, amor, y en mí termina.

Miguel Hernández. Imagen de tu  huella.


Hace tiempo un amigo me llamó para pedirme consejo para reconquistar a una chica de la que estaba enamorado hasta las trancas...,no me llama, no me coge el teléfono, a saber que le habrás hecho ladrón le dije yo...andaba como alma en pena el tío. Tú que eres un poco literato aconséjame algo romántico, me dijo, una carta o un poema, algo para romper el hielo . Mándale un ramo de rosas y esta antología de sonetos de amor con un tarjetón con este poema (el de arriba),  a ver si cuela, si no cuela con esto date por jodido. Parece que coló porque siguen juntos.

Cuando ando disperso  no me apetece leer novelas o ensayos  y me agarro a los libros de poemas, voy sobre seguro y releo a los clásicos, los que me marcaron en su día. Como tantos, abrí el melón de la poesía con Bécquer y Espronceda, y seguí con la generación del 27 la del 36 y la del 50, bueno y  con Machado por supuesto. La edición de Austral de las poesías completas de Machado la tengo bastante trillada, me gustan todos, pero hay algunos en los que me paro más rato, el XXXV de más arriba es uno de ellos,  otro es Un loco (CVI de poesías completas)
 
 
 
 
 

          La cordura, la terrible cordura del idiota...
 
 
Cernuda también me gusta mucho...
 
  
 
 
                     
 
Y Rubén Darío,  especialmente Cantos de vida y esperanza...


                                                                            Lo fatal

                                                     Dichoso el árbol, que es apenas sensitivo,
                                                     y más la piedra dura porque ésa ya no siente,
                                                     pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo,
                                                     ni mayor pesadumbre que la vida consciente. 

         
                                                    Ser, y no saber nada, y ser sin rumbo cierto,
                                                    y el temor de haber sido y un futuro terror...
                                                   ¡Y el espanto seguro de estar mañana muerto,
                                                    y sufrir por la vida y por la sombra y por

         
                                                   lo que no conocemos y apenas sospechamos,
                                                   y la carne que tienta con sus frescos racimos

                                                  y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos,
                                                  y no saber adónde vamos,
                                                  ni de dónde venimos...!


                                                  Rubén Darío. Cantos de vida y esperanza.



No he salido mucho de los clásicos españoles a la hora de leer poesía la verdad. Hace poco descubrí a William Blake (Londres 1757-1827), poeta y pintor,  y me gustó bastante. Aquí os dejo uno de sus poemas más conocidos.

 
Tigre, tigre, que te enciendes en luz
por los bosques de la noche
¿qué mano inmortal, qué ojo
pudo idear tu terrible simetría?
¿En qué profundidades distantes,
en qué cielos ardió el fuego de tus ojos?
¿Con qué alas osó elevarse?
¿Qué mano osó tomar ese fuego?
¿Y qué hombro, y qué arte
pudo tejer la nervadura de tu corazón?
Y al comenzar los latidos de tu corazón,
¿qué mano terrible? ¿Qué terribles pies?
¿Qué martillo? ¿Qué cadena?
¿En qué horno se templó tu cerebro?
¿En qué yunque?
¿Qué tremendas garras osaron
sus mortales terrores dominar?
Cuando las estrellas arrojaron sus lanzas
y bañaron los cielos con sus lágrimas
¿sonrió al ver su obra?
¿Quién hizo al cordero fue quien te hizo?
Tigre, tigre, que te enciendes en luz,
por los bosques de la noche
¿qué mano inmortal, qué ojo
osó idear tu terrible simetría?

William Blake, El tigre.
 
 
 
De Blake no perdáis de vista su poemario El matrimonio del cielo y el infierno. Una maravilla.
 
También he descubierto hace poco a Víctor Botas, un poeta poco conocido pero que no tiene desperdicio. Siempre que enciendo la tele y escucho la radio me acuerdo de este poema suyo.
 

EZRA POUND COMO MÚSICA DE FONDO

Economistas, químicos,
sociólogos, sicólogos, sexólogos, expertos
en temas de lingüística,
y toda esa quincalla de los medios
de comunicación
social (también llamados,
por los más cultos, mass
media), ahora,
son flámines, arúspices;
en suma, son los sumos
sacerdotes: nos dan
la prensa como hostia, el sufragio
universal ( y las vacunas) como
circuncisión. ( También los buenos días
por la radio).

Nos dominan legiones
de mediocres, ocultos
bajo un título: habría
que temer mucho más a estos señores
que al mismísimo Atila.

Pero no;
los dejamos hacer, y así nos luce
el poco pelo que nos va quedando.

Aguas mayores y menores. Víctor Botas.
 

Nos dominan legiones de mediocres ocultos bajo un título..., ya te digo Víctor,  lo bordaste. Los mass media, la materia prima con la que el personal se forma un criterio, qué peligro.  Este poema es de los años 80, parece que la cosa no ha mejorado mucho. Entre otras cosas no hemos conseguido sacudirnos la titulitis.  En la universidad fue donde descubrí que los estudios universitarios están sobrevalorados.

Qué me perdone el gran Fernando Pessoa, pero a mí me gusta más esta nueva versión que hace Víctor Botas en Segunda mano de una de las odas a Ricardo Reis del portugués ...




Me gusta mucho esta oda a Ricardo Reis a la que el amigo Botas da una mano de pintura, sobre todo eso de Perenne fluye la inacabable hora que nos proclama nulos...La vida está aquí y ahora, no hay nada después de la última mueca...¿o sí?...
He empezado esta entrada un poco de bajón y ya me estoy viniendo arriba, para terminar de arreglarlo esta tarde me voy a poner Cantando bajo la lluvia. Como dijo Escarlata O´Hara, al fin y al cabo mañana será otro día.

Saludos cordiales.

- La mayoría de los libros de poemas que han salido por aquí campan a sus anchas en librerías y bibliotecas municipales.  De William Blake hay varias antologías bilingües  en bolsillo a precios populares.  En Visor hay una edición bilingüe de las poesías completas en tapa dura, esa es la que yo encontré en la biblioteca.  Hace poco se han vuelto a reeditar las poesías completas de Víctor Botas, son 30 eurazos pero creo que merece la pena, a ver si sale en bolsillo. http://www.casadellibro.com/libro-poesia-completa/9788415039907/1998920